
Ella, hermosa, solitaria y triste. Siempre esperando
a Ulises. Tejiendo su propio destino en lo incierto,
dejando que sus silencios atrapen la ausencia del destino.
Ella, desdeñosa ante la mirada codiciosa de los hombres,
aguardando siempre el regreso de Ulises.
Y él, alternando con la vida, entre aguas turbulentas
guerreando su destino y sus quebrantos…
Siendo hombre de silencios y de luchas, proporciona
a sus dioses guerras únicas.
En medio de la furia y el desaliento, regresa dispuesto
a enjugar las lágrimas de ella, que lo espera,
envuelta en sedas de amor y de esperanza.
Ya ha esperado tanto tiempo, y otros tantos
se los ha robado el sufrimiento…
Penélope, Penélope… esperar es tan doloroso
que yo no sigo tus lamentos, pobre mortal que soy
mejor hago mi duelo, y olvido por completo.
Vendrán nuevos amaneceres, y otro Ulises
que borre mi tristeza.
a Ulises. Tejiendo su propio destino en lo incierto,
dejando que sus silencios atrapen la ausencia del destino.
Ella, desdeñosa ante la mirada codiciosa de los hombres,
aguardando siempre el regreso de Ulises.
Y él, alternando con la vida, entre aguas turbulentas
guerreando su destino y sus quebrantos…
Siendo hombre de silencios y de luchas, proporciona
a sus dioses guerras únicas.
En medio de la furia y el desaliento, regresa dispuesto
a enjugar las lágrimas de ella, que lo espera,
envuelta en sedas de amor y de esperanza.
Ya ha esperado tanto tiempo, y otros tantos
se los ha robado el sufrimiento…
Penélope, Penélope… esperar es tan doloroso
que yo no sigo tus lamentos, pobre mortal que soy
mejor hago mi duelo, y olvido por completo.
Vendrán nuevos amaneceres, y otro Ulises
que borre mi tristeza.
Lila Manrique